Soy pacífica, inocente, hermosa y orgullosa de ser raptada por un dios montado sobre briosos caballos negros. Y, dando con el cetro en el suelo, se abre la tierra, y ¡ale!, al Infierno. Si es de ensueño, tú piensa y verás qué atractivo resulta.
martes, 18 de febrero de 2014
LA BELLEZA EXISTE SIN LUGAR A DUDA EN LA NATURALEZA
Valla fotos bonitas Guille. Un fuerte abrazo y feliz fin de semana.
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